“Una veterinaria que dibuja, y a veces baila. Estudia y explica cosas”
Pau es, ante todo, el ser humano que está detrás de la camilla.
La mayor parte del día, Pau es la que trabaja, atiende, estudia, explica, receta, cura, calma, cuida. Pero en el 2017, a tres años de recibida, ser “Pau Veterinaria” fue insuficiente. La profesión que elegí es vocacional, altruista, desafiante, gratificante… para compensar lo solitaria, ingrata, dura e injusta que puede llegar a ser. Empecé a dibujar lo que me pasaba, lo que sentía, veía, soportaba, como médica veterinaria. Dibujar y escribir fue el modo de llevar adelante una lucha por la reivindicación del profesionalismo, del compromiso, de la honorabilidad de ser médicos veterinarios, de las obligaciones que ello conlleva… y del merecimiento de respeto.
Una veterinaria de papel y pinturita, que defiende animales, causas, colegas e ideas; se ríe, se divierte, sufre, y satiriza la vida de un veterinario de a pie.
Dandelion me abrió puertas inimaginables.
En verano 2020, finalmente vio la luz mi libro “Dandelion – Albeitar”, sobre veterinaria y tenencia responsable; un libro divertido, melancólico… e inevitable.
